miércoles, 13 de febrero de 2013

La rueda de prensa que no es

Hace unos días, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, anunció una rueda de prensa para explicar algunos detalles de lo que está sucediendo en los últimos tiempos en el Partido Popular. Para sorpresa de todos, cuando tendría que llegar el turno de preguntas, los periodistas fueron incapaces de llevar este a cabo porque el presidente no estaba compareciendo in situ, sino en otra sala, a través de una pantalla de televisión.
Parece ser que en la prensa de los países vecinos esta costumbre de Rajoy de convocar ruedas de prensa que, en realidad, no son ruedas de prensa es bastante comentada. Y no es para menos. Como alguien dijo alguna vez, "sin periodistas no hay periodismo y sin periodismo, no hay democracia" y si el presidente del Gobierno español sigue en esta línea suya de citarse con la prensa de manera 'virtual', seguramente -y con razón- los profesionales de la comunicación y de la información acabarán por rebelarse de alguna manera ante un presidente de Gobierno que está empezando a poner demasiadas trabas a ese matrimonio entre el periodismo y la democracia.
Sea como fuere, Mariano Rajoy y el Partido Popular no son los únicos en convocar ruedas de prensa que no admiten preguntas o que tienen vetados algunos temas para los periodistas que acuden a cubrir la información. Esto sucede, incluso, en el terreno deportivo. Por tanto y ante una unión cada vez mayor en este sentido, la parte contraria, es decir, los profesionales de la información, esos intermediarios entre 'los de arriba' y los ciudadanos de a pie, deberían también tomar la decisión de seguir aquello de 'la unión hace la fuerza' y, como decía la escritora Elvira Lindo, dar "un plante" a aquellos que todavía se creen jefes de e intocables por el cuarto poder.